“NO SE DEFIENDEN LAS EMPRESAS PÚBLICAS FUNDIÉNDOLAS NI UTILIZÁNDOLAS PARA CARRERAS POLÍTICAS PERSONALES O SECTORIALES. ACÁ HUBO INEPTITUD, DESPILFARRO Y CORRUPCIÓN”
Intervención del Diputado del 26 de Marzo (Unidad Popular), Eduardo Rubio en la Sesión Extraordinaria de la Cámara de Diputados del 2 de enero de 2016 donde se aprobó la capitalización de ANCAP

“Es muy grave la situación que tiene ANCAP, es gravísima, no es de trámite”, dijo el diputado Eduardo Rubio (26 de Marzo, Unidad Popular) al hacer uso de la palabra en la Sesión Extraordinaria de la Cámara de Diputados citada para el sábado 2 de enero de 2016, con el fin de aprobar la capitalización de ANCAP; Sesión que transmitió en vivo y en directo, en forma íntegra, Radio Centenario. El diputado Rubio recordó la lucha que ha llevado adelante su fuerza política en defensa de las empresas públicas, “a nosotros no nos van a decir que no defendemos a las empresas públicas” dijo y subrayó que al contrario que lo que sucede con otras fuerzas políticas, “hoy seguimos en la misma línea”.  Más adelante opinó que “acá se plantea que se pone ese dinero y no pasó nada” pero “darle 5 mil dólares a una radio de un amigo que no existe, es corrupción”. También sostuvo que “no se defienden las empresas públicas fundiéndolas ni utilizándolas para carreras políticas personales o sectoriales”. Por eso “acá hubo ineptitud, acá hubo despilfarro, acá hubo corrupción”, enfatizó el Diputado del 26 de Marzo. En otro momento de su intervención se refirió a las declaraciones del ex presidente José Mujica. “El Presidente de la República ¿no sabía el manejo financiero de la principal empresa pública del país? ¿Y qué sabía? ¿Cómo puede ser Presidente y no saber lo qué pasa en la principal empresa del país?”, cuestionó.  Transcribimos la intervención del Diputado del 26 de Marzo (Unidad Popular), Eduardo Rubio, que puede volver a escuchar aquí:
http://www.ivoox.com/intervencion-del-dip-eduardo-rubio-26-marzo-audios-mp3_rf_9945934_1.html

Presidente: Continuando con la lista de oradores tiene la palabra el diputado Eduardo Rubio.

Diputado Eduardo Rubio: Gracias, señor Presidente.
Yo creo que es imprescindible arrancar remarcando que no es por casualidad ni porque todo esté bien ni porque sea una cuestión casi de trámite que la Cámara de diputados haya sido convocada a sesionar el 1 de enero y el 2 de enero. Y no nos quejamos. Ayer estuvimos acá, en cuanto se levantó el receso estuvimos acá, votando en contra de esta Sesión Extraordinaria para aprobar este proyecto de Ley. Y creo además, que como legisladores estamos a la orden porque para eso nos elige la gente. Entonces, no es por un tema de fecha. Lo que sí es real es que una Sesión convocada en estas fechas sólo obedece –por la historia- a razones excepción ales.
Es muy grave la situación que tiene ANCAP. Es gravísima. No es de trámite.
Una primera aclaración: A nosotros nadie nos podrá decir que no defendemos las empresas públicas.
En nuestra historia -y no vamos a caer en la soberbia de que defendimos más que nadie- lo que sí podemos a decir con tranquilidad es que quienes militamos en la Unidad Popular hemos estado siempre en la primera línea de combate en la defensa de las empresas públicas y en contra de las privatizaciones.
Tal vez no más que nadie, pero si más que muchísimos otros. Porque en medio de debates anteriores sobre privatizaciones, aquí se hacía referencia a eso, cuando éramos parte del Frente Amplio, antes del gobierno, se dieron discusiones si con sectores que estaban de acuerdo con la asociación o la privatización de ANCAP.
Estuvimos en la primera línea de batalla.
Y hoy seguimos en la misma línea. Más convencidos todavía que antes, de que no sólo hay que defender las empresas públicas que tenemos sino que hay que promover el rol del Estado en áreas estratégicas de la Economía. Está en el Programa de la Unidad Popular que no tiene 200 páginas, tiene menos, pero dice cosas esenciales y una de ellas es esta.
Y quiero decir que no se defienden las empresas públicas fundiéndolas, que no se defienden las empresas públicas utilizándolas para carreras políticas personales o sectoriales.  
Aquí he escuchado por parte de la bancada oficialista -y no sé si hablar de empresa pública, el otro días escuchaba al senador Agazzi que no son empresas porque las empresas son para ganancias, pero son empresas públicas en última instancia o como se las quiera llamar y no están siempre para dar ganancia- que hay que tener una Cuenta País. Totalmente de acuerdo.
Que cumplen un rol social. Totalmente de acuerdo.
Ahora, hay que ser coherentes cuando se plantea esto, porque el otro día en el Senado se vetó, se bochó, se encajonó, un proyecto de Ley que lo único que proponía era extender el régimen de excedencia vigente en AFE para poder dar la pelea y salvar a AFE como empresa pública. Y el Frente Amplio se negó en el Senado, encajonó, y condenó a los trabajadores ferroviarios a un régimen de  excedencia terrible, en un camino de desmantelamiento de AFE.
Y voy a aclarar que es un proyecto que presentamos junto con el diputado Ezquerra, con el diputado Peña y con el diputado Amado; porque el otro día me enteré en Paysandú que había versiones de algunos diputados oficialistas que ese proyecto había brotado por arte de magia, nadie lo había presentado. Lo presentamos nosotros.
Y acá por suerte hubo unanimidad. Pero el Frente Amplio en el Senado, creo que obedeciendo al llamado de algún Ministro, encajonó el proyecto. Estoy seguro que dentro de un año o año y medio estaremos discutiendo acá el tema de AFE. En otra dimensión.
Queremos salvar a ANCAP, ahora este no es el camino.
Acá se nos propone volcar a ANCAP seiscientos veintidós millones, más, ochocientos o novecientos millones de dólares, en una situación que es como colocarla en un barril sin fondo. Porque acá se plantea que se pone ese dinero y no pasó nada.
Ahora, ¿por qué llegamos a esa situación?
Esto es fruto de la desastrosa administración que tuvo ANCAP. ¿Qué otra manera hay de describir esto? Y miren que no es una visión sólo nuestra. Tengo acá textos de representantes del partido de gobierno que opinan lo mismo.
Acá hubo ineptitud, acá hubo despilfarro, acá hubo corrupción.
¿O cómo llamarle -para poner el ejemplo más trillado- a darle publicidad a una radio que no existe, a un amigo?
Eso es corrupción.
Y me van a decir pero son sólo cinco mil dólares.
Me acuerdo de un dicho que tenía el inolvidable doctor Helios Sarthou, que cuando planteaban cosas así decía: “Lo que pasa es que no puede estar un poquito embarazada la nena. Está embarazada o no está embarazada”.
Entonces con cinco mil dólares, con cincuenta mil o cinco millones, la corrupción es corrupción.
Y habrá que ver qué pasa cuando la Investigadora informe porque hay muchas más cosas. La repetición de sobrecostos, las fiestas, se habló acá de acomodar a los amigos, de los amigos, de sueldos de Ópera. En fin.
Pero se plantea ponerle novecientos millones de dólares a ANCAP sin mover a un solo responsable.
Se consolida ese criterio de impunidad.
Y no va a alcanzar porque ya el ministro Astori anunció que habría que aumentar la tarifa de los combustibles porque dentro de dos o tres meses el problema se va a replantear.
Acá se ha planteado también que esto no generó ninguna “interna”. No. Generó una batalla interna en el partido de gobierno, en el que nadie se hace responsable de nada.
Tengo acá una nota del señor Esteban Valenti, reconocido   dirigente del Frente Amplio, donde dice que en “la Lista 711 atacan ferozmente y no asumen nada. Y por este camino el Frente Amplio va a perder lo fundamental, que no son los votos, sino sus principios y valores. Basta de hipocresía”, dice Valenti. Y pregunta: Acaso fue Astori o Lorenzo los que construyeron un remolcador que costó doce millones de dóalres, (y está) parado hace dos años y pagamos seis millones a una empresa de remolcadores. Acaso fue Astori o el Ministerio de Economía que le hizo gastar a ANCAP diez millones de dólares de publicidad en medio de la pérdida de trescientos cincuenta millones. Acaso fue el Ministerio de Economía y Finanzas que obligó a adelantarle dos millones a una empresa brasileña de camiones, para hacer los fletes de cal -de allá de Treinta y Tres- por diecisiete millones de dólares. Acaso fue el MEyF que les hizo asumir una deuda de dos mil cien millones de dólares a corto plazo, igual que la de los blancos y colorados”, dice Valenti.
“Acaso fue el MEyF que les hizo regalar a ANCAP tres mil cien millones de dólares a una financiera internacional por una negociación de Estado a Estado”. Será Transfigura, me imagino. Y sostuvo Valenti: “No es una lucha interna. Es entre los que asumen su responsabilidad y pagan y los que se han lavado las manos con nafta de ANCAP”:
¿Qué no hay lucha interna?  
El otro día el es presidente Mujica dijo que la habían “chamboneado” y que no sabía nada. Esto es impresentable. El Presidente de la República no sabía el manejo financiero ni el destino de las inversiones de la principal empresa pública del país.
La pregunta que uno se hace es ¿qué sabía el Presidente?
Yo creo que acá hay dos tipos de responsables.
Están los responsables directos, los que estuvieron al frente de la administración de ANCAP, los directores, los Directorios, que tienen que asumir.
El otro día escuchando el debate del Senado y los Senadores de la oposición invitaban al Presidente de la Cámara, el senador Sendic, que fue responsable directo en todo esto, que bajara a debatir. Y no bajó. Esa es una manera de no asumir responsabilidades.
Y están los responsables indirectos. El ex presidente Mujica, el Dr. Vázquez ¿cómo pueden ser Presidente y no saber lo que pasa?
Es la principal empresa pública del país.
Esta es la demostración de una política encarada por el Frente Amplio que fracasó.
Fracasó porque se habla de defender las empresas públicas sin embargo en este período se multiplicaron las sociedades anónimas, que son una manera de privatizar  la gestión pública y eliminar el control parlamentario.
Esa política fracasó. Esa política nos ha generado pérdidas tremendas.
Fracasó en la privatización de PLUNA y fracasó en la gestión de ANCAP. Hoy se hablaba de OSE, de las inversiones en OSE, no se notan en la calidad del agua ni en las pérdidas millonarias por pérdida de agua.
Hay que revisar estas políticas y afondo, en la defensa de las empresas públicas y el rol del Estado. Porque uno puede preguntarse cómo es que si se invirtió tanto se pierde tanto. Pero claro, si a la primera caldera de ALUR, estaba la opción de utilizar las dos calderas que tenía la vieja CALNU y hay una cotización de un millón de dólares para ponerlas a punto que se adecuaban totalmente a ese ingenio. Pero se optó por otra cosa: por gastar doce millones de dólares en una caldera que estaba tirada en Brasil, de la empresa Cadema o Caldema. Claro, así se pierde plata. Y después estuvo dos años y pico parada porque no podía funcionar. 
¿Y el avión que compró ANCAP?
¿Eso es parte de las inversiones para que la empresa se fortalezca? ¿Las fiestas?
Yo me acabo de enterar que una empresa subsidiaria de ANCAP fabrica perfumes.
No. Yo no quiero para eso a las empresas públicas. ANCAP es una petrolera, con un rol fundamental en el cemento, ¿pero fabricar perfumes? Me parece que no.
Y con gerentes que tienen sueldos más altos que los Presidentes. Ahí perdemos plata.
Perdemos plata contratando una Consultora para saber cómo ganamos plata con el portland… Siete millones de dólares pagados a la Consultora y seguimos perdiendo plata.
Entonces, invertir hay que invertir. Pero hay que invertir bien.
Nosotros prensamos que aquí no se puede dar otro cheque en blanco; que acá para recuperar a  ANCAP lo primero que hay que hacer es establecer las responsabilidades y cambiar la política. Obviamente.
Porque acá se ha hablado que esto no tiene comparación con el Presupuesto. Ahora, como lo decía uno de los Diputados preopinantes, es plata que no va a estar para gastar en la vida del país. Estos seiscientos veintidós millones de dólares que ANCAP no le paga al Ministerio de Economía y Finanzas es plata que va a faltar después para las Escuelas, para la construcción de viviendas, para mejorar la gestión de OSE para mejorar la calidad del agua.
En un cálculo aproximado, sólo con lo que pone el Estado ya no con el endeudamiento que vamos a tener con el Banco, se podrían construir bastante más que diez mil viviendas, se podrían construir 16 hospitales y hoy no podemos reparar el Clínicas; podríamos construir aproximadamente 622 escuelas; podríamos construir 311 Liceos; ni que hablar de lo que podríamos pagar en salario docente y mejorando el salario docente, eliminando los chantajes que se aprobaron en el Presupuesto. A cada familia uruguaya, tomando un dato arbitrario en el que podemos dividir por familias tipo de cuatro personas; a cada familia uruguaya le va a costar esta fiestita de ANCAP 752 dólares. Es mucha plata para una familia uruguaya cuando estamos hablando que hay cientos de miles de trabajadores que ganan 15 o 16 mil pesos por mes o menos; y ni que hablar de los jubilados.
Señor presidente, una vez más hemos escuchado acá en este recinto, la argumentación de que van a votar esto no solos sino con la mayoría que le ha dado el pueblo en la elección nacional por tercera vez. Y esta es una verdad irrefutable, por tercera vez el Frente Amplio gobierna por mayoría que no siempre está, el otro día faltó esa mayoría y otras veces ha faltado.
Pero tengo una convicción y es que la mayoría del pueblo que votó al Frente Amplio no lo votó para que fundieran a ANCAP. No lo votó para que fundieran a las empresas públicas, no lo votó para que desmantelaran AFE, no lo votó para que pusieran en cuestionamiento el futuro de un país que merece, sin duda, un destino mejor, con empresas públicas fuertes que aseguren un desarrollo soberano propio y la construcción de la justicia social.
Este camino es el camino que va en el sentido inverso.
Por eso no vamos a votar este proyecto de Ley, señor presidente.
Muchas gracias.