Ramyan SA, con plantas en Canelones y Maldonado, informó que no está en condiciones de reabrir y que no tiene fondos para el pago de los créditos laborales.
El Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) informó mediante un comunicado que la rama Hormigón “se declara en conflicto y profundiza las medidas” ante la situación en que “hoy se encuentran las y los trabajadores de la empresa Ramyan SA-Hormigones.
“Como es de público conocimiento, más de 90 familias quedaron sin su fuente de trabajo a partir del cierre sin previo aviso de las plantas de dicha empresa, debiendo al día de hoy los salarios correspondientes a la liquidación del mes de marzo, y no hay certeza del cobro de la licencia”, dice el texto difundido por el sindicato .
El secretario general del Sunca, Javier Díaz, informó a la diaria que Ramyan comunicó a sus trabajadores que no tiene fondos para abonar las licencias ni los despidos, si finalmente decide cesarlos.
La plantilla de la firma asciende a unos 100 trabajadores. Ramyan tiene tres plantas, dos en las ciudades de Pando y La Paz, en Canelones, y la otra en el departamento de Maldonado.
Díaz comentó que este miércolesse realizò una reunión de una comisión de conciliación en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social para tratar este tema, y subrayó que además de integrantes del Sunca, sólo asistieron representantes de la Liga de la Construcción, pero no de las otras tres cámaras empresariales del sector.
Acerca del resultado de la instancia, respondió que “hoy no hay certeza de que la firma continúe operativa ni de que pague los créditos laborales a los trabajadores”.
El dirigente dijo que Ramyan vendió el mes pasado alrededor de 10.000 metros cúbicos de hormigón y que, “según ellos mismos, ya tenían prácticamente vendidos, o en condiciones de vender, 70% del hormigón, esto para 2026”.
Consultado acerca de si tenía conocimiento de los motivos por los que asistió una sola de las cámaras empresariales al MTSS por la situación de Ramyan, afirmó que ven “una actitud pasiva de las cámaras”. “No sólo en el problema de Ramyan, sino también con los obreros en el puerto de Montevideo, con Balsa & Asociados y otros asuntos. Esa actitud pasiva no parece ser casualidad. Tiene mucho que ver con que vienen alentando que se precarice el trabajo también en la industria de la construcción y que se retroceda en materia de leyes, normas y decretos”, aseguró.
Dijo que en el marco de la declaración de conflicto en la rama del hormigón “se están haciendo asambleas no coordinadas, a los efectos de informar y analizar la situación de Ramyan y los pasos a seguir”.
A partir del martes, además de las asambleas no coordinadas, el Sunca de la rama Hormigón adoptó medidas como el “corte de las horas extras en toda la rama”.