Aviones de combate israelíes dispararon dos misiles contra el Hospital Bautista en la Franja de Gaza, apuntando específicamente al edificio de ambulancias, lo que provocó daños significativos en los departamentos de recepción, laboratorio y farmacia.
Según reportes del corresponsal de Al Mayadeen, el hospital fue evacuado tras una segunda señal de alarma. “Decenas de pacientes y heridos, algunos en estado crítico, yacen en las calles que rodean el hospital”, indicó.
La Oficina de Prensa del Gobierno en Gaza denunció que este ataque constituye una repetición de una masacre previa en el mismo hospital, durante la actual guerra de genocidio llevada a cabo por la ocupación israelí, que ya ha cobrado cientos de vidas civiles inocentes.
Denunció que «la ocupación criminal repite la misma escena sangrienta, en flagrante desafío a todas las leyes internacionales y humanitarias que penalizan los ataques contra instalaciones médicas y personal sanitario”.
El comunicado detalló que la ocupación israelí destruyó 34 hospitales deliberadamente dejándolos fuera de servicio como parte de un plan sistemático para eliminar el sistema sanitario en Gaza.
Asimismo, se responsabilizó a «Israel», Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Francia, por su participación directa o apoyo en lo que calificaron como actos de genocidio y terrorismo organizado.
La declaración instó a la comunidad internacional, a los organismos de las Naciones Unidas y a las organizaciones humanitarias y de derechos humanos a condenar este crimen y actuar con urgencia para proteger las instalaciones médicas restantes en la Franja de Gaza.
De acuerdo con el comunicado, el Hospital Bautista era una de los pocos en funcionamiento con varios departamentos especializados y era clave para la atención de más de un millón de palestinos en el norte y centro de la Franja.
Actualmente, el sistema de salud en Gaza enfrenta un colapso casi total debido a la ofensiva militar, el bloqueo humanitario y la falta de suministros médicos.