Varios artistas internacionales, como Lorde y Paloma Faith-foto-, se unen a la campaña «No a la música por el genocidio», que insta a los músicos a bloquear geográficamente su música en Israel mientras continúe la guerra en Gaza.
El sello discográfico Hyperdub también ha retirado todo su catálogo de las plataformas de streaming, según informa Pitchfork.
Más de mil artistas se han unido para protestar contra lo que los organizadores llaman «genocidio israelí en Gaza, limpieza étnica en la Cisjordania ocupada y apartheid dentro de Israel». Massive Attack y Björk, entre otros, han declarado previamente que quieren impedir que su música se reproduzca en Israel.
Massive Attack también apoya otra campaña para eliminar toda su música de Spotify, dirigida contra las inversiones de su fundador, Daniel Ek, en una empresa europea de tecnología de defensa