Foto; Nave de la Marina de EEUU en Trinidad y Tobago/EFE
El canciller de Venezuela, Yván Gil, denunció que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos dirige una operación de falsa bandera desde Trinidad y Tobago para justificar una agresión militar contra su país. Gil informó con claridad al Gobierno trinitense sobre el plan, que consistiría en atacar un buque militar estadounidense estacionado en la isla para luego culpar a Venezuela y detonar un enfrentamiento.
El diplomático puntualizó que en territorio venezolano “se está desmantelando una célula criminal financiada por la CIA vinculada a esta operación encubierta” y exigió a Trinidad y Tobago que actúe con la misma responsabilidad.
“Esperamos que Trinidad y Tobago haga lo propio y no permita que su territorio sea usado para maniobras que amenazan la paz del Caribe”, manifestó el canciller en un comunicado oficial.
De acuerdo con Gil, se trata del “mismo guion imperial del barco Maine y del Golfo de Tonkin”, tácticas que consisten en fabricar un conflicto para imponer intereses ajenos a la región del Caribe.
El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela hizo un llamado directo a la primera ministra de la nación insular, Kamla Persad-Bissessar, a quien instó a asumir su responsabilidad ante el Caribe y la historia.
“O se pone del lado de la paz o se hunde en la agenda de la CIA”, aseveró Gil, quien ratificó que Venezuela no caerá en provocaciones, pero defenderá su soberanía “sin titubeos”.
El jefe de la diplomacia venezolana expresó su respeto por el pueblo de Trinidad y Tobago y su confianza en que su conciencia impedirá que el país sea arrastrado a “una operación sucia de guerra”.
La República Bolivariana de Venezuela denunció el domingo 26, la realización de ejercicios militares en Trinidad y Tobago. El Gobierno venezolano informó que estas maniobras son coordinadas por la CIA y financiadas por el Comando Sur de Estados Unidos, con el objetivo de provocar un enfrentamiento armado contra territorio venezolano.
Fuentes del Ministerio de Defensa informaron sobre la captura de un grupo mercenario que habría recibido instrucciones e información de inteligencia estadounidense respecto a un inminente ataque de falsa bandera. El objetivo, aseguran, sería generar un escenario de guerra controlada que permita justificar nuevas sanciones, aislamiento diplomático y acciones militares en la zona petrolera del Caribe.
El Gobierno Bolivariano reiteró su compromiso con la paz, la verdad y la soberanía, y advirtió que cualquier intento de agresión recibirá una respuesta proporcional y contundente, en defensa del derecho de los pueblos a su autodeterminación.
Las operaciones de falsa bandera han sido utilizadas en distintos momentos de la historia como pretexto para iniciar conflictos armados o justificar intervenciones extranjeras.
Uno de los casos más citados es el hundimiento del acorazado USS Maine en la bahía de La Habana en 1898, suceso que sirvió como detonante de la Guerra Hispano-Estadounidense, tras la cual Cuba, Puerto Rico y Filipinas pasaron a dominio de Estados Unidos.
Otro antecedente fue el incidente del Golfo de Tonkin, ocurrido en 1964, cuando Washington denunció un supuesto ataque de fuerzas norvietnamitas contra buques estadounidenses. Este hecho llevó al Congreso de Estados Unidos a aprobar la resolución que amplió la guerra de Vietnam, aunque años después se demostró que los informes iniciales fueron exagerados o falsos.