En la actividad en homenaje a Ernesto Che Guevara que realizaron en la tarde del miércoles 8 los jóvenes de Unidad Popular, intervino la integrante de la Coordinación por Palestina/Uruguay , Daniela Lópes. La siguiente es su intervención textual.
Compañeros, compañeras agradecer la invitación al acto aniversario de los 58 años de la caída del revolucionario Ernesto Che Guevara.
Desde la fundación de Israel en 1948, un proyecto de colonización respaldado por potencias como Gran Bretaña y Estados Unidos, la causa palestina se ha convertido en un símbolo universal de resistencia.
Fue una resistencia que nació como respuesta natural a una limpieza étnica, marcada por masacres y expulsiones forzadas que culminaron en la Nakba: la catástrofe que significó la pérdida de su patria. La población nativa, desplazada de sus tierras, fue forzada a vivir en campos de refugiados en Gaza, Cisjordania y países vecinos, sobreviviendo con la ayuda internacional. Abrigaron la esperanza de un pronto regreso, pero 77 años después, el derecho al retorno sigue siendo una promesa incumplida y el corazón de su lucha.
En esa lucha, encontramos símbolos de solidaridad que trascienden fronteras. Ernesto “Ché” Guevara es un emblema de ese internacionalismo, un hombre que vivió por la liberación y la autodeterminación de los pueblos. Hace 66 años, este revolucionario argentino llegó a estas tierras heridas por la Nakba.
Llegaba con el polvo de las montañas de Cuba en sus zapatos, vestía un uniforme verde olivo y llevaba su icónica boina. Junto a él, caminaban líderes de la resistencia palestina. A su alrededor, se extendía un paisaje desgarrador: campos de cultivo abandonados, casas vacías sin familias y la sombra de colonos armados.
Hoy, 77 años después de la primera Nakba, y a dos años de este nuevo genocidio —llevado a cabo por el régimen sionista de Israel con el apoyo de Estados Unidos, y que ya ha cobrado la vida de más de 66.000 palestinos— la lucha contra la colonización, el apartheid y la ocupación está más firme que nunca. La heroica resistencia del pueblo palestino no será quebrantada.
Palestina nos interpela como humanidad. Nos coloca frente a una encrucijada histórica: ¿Qué legado dejaremos a las próximas generaciones? ¿Será uno de solidaridad y humanismo, o uno de sálvese quien pueda y barbarie?
Como nos enseñó el Che, seamos capaces de “sentir en lo más hondo cualquier injusticia cometida contra cualquiera, en cualquier parte del mundo”. Que esa sea nuestra guía. Que su ejemplo, y el del pueblo palestino, sea nuestro combustible para no retroceder en esta lucha por la justicia.
Por eso hoy queremos convocarlos a la marcha que se llevará a cabo el día de mañana, 18:30 horas desde la explanada de la intendencia. Por paz, por justicia, por libertad, ¡BASTA DE GENOCIDIO!
Compañeras, compañeros, ¡que la juventud sea viento en la bandera de palestina!
¡Hasta la victoria siempre!
¡Viva Palestina libre!